Wednesday, March 05, 2008

crujidero

lejos y la percusión de los terrones/del libro y del aire
la misma que oí en los dibujos/antes de la cicatriz
tiene el mismo olor cristalino/el escorial tiene espadas de coco
que suenan a hojas secas/porque es normal
la ronda mediterránea/desbordándose
cerca y el encierro en las guaridas/de la hiel y del ratón
el mismo que se refleja en las fotos/después de la cicatriz
tiene el mismo olor a erupción/la casa no es un hotel/son varias
rondas de aluviones de hojas fruncidas/desmenuzándose

(este poema fue publicado en la nueva edición de la revista ventizca, marzo 2008. gracias a guadalupe wernicke!)
el pez cree
que su pecera es el océano
no hay ataúdes
en sus ciclos
ni esperanza de profesión
ni familia
no recuerda el recorrido
ni le importa
cúantos metros
haber amamantado
que le digan que no
a su porción de atmósfera
(porque a todos nos corresponde)
pecera tanque cuchara
no hay agua
cuando los peces se dibujan
indistintamente del tiempo
no hay río en la inminencia
y la abruma

el aire es un lugar ideal
para llevar el mantel
y hacer un pic-nic

por eso despliega las telas
y se envuelve en sus cuadrículas
se deja succionar por los insectos
la sangre

el aire más que viento es brisa
y las migas se sacuden solas
se pegan en su piel
los promedios
del viaje que siempre es una duración
incompatible
de música y aire y diafragma
de sombras sin pies
ni zapatos
ni sexo

y las ellas son yos
nosotros
en la circunstancia estival
de nuestra posición de cercanía
con el sol
secándonos sin saber
si volveremos a estar mojados
Sometimes I wonder why. Should I start wondering how? Probably.